

El gremio de los judiciales comunicó su participación en la medida de fuerza, con ausencia total en los lugares de trabajo, al tiempo que reclamó por aumento de salarios; fin al techo paritario; contra los despidos y la quita de derechos; una jubilación digna y mayor presupuesto para Salud y Educación.
Por su parte, ATE prevé un alto acatamiento en las dependencias nacionales que funcionan en Río Negro y también en la administración pública provincial y los municipios. Sólo se garantizarán guardias en hospitales, la SeNAF y el Ministerio de Desarrollo Humano.
Sobre este paro general, Romeo Aguiar, secretario gremial de ATE Río Negro, dijo que «el gobierno se encuentra en un estado de debilidad autopropiciado por su política económica que ajusta a la mayoría de la gente y exime de impuestos a la minoría pudiente”, dijo y agregó que «esta huelga debió haber llegado mucho antes, ahora debemos acelerar y profundizar la protesta. Hace meses que están dadas todas las condiciones para unir todas las luchas muchas de ellas invisibilizadas pero existentes”.