

Por: Bache3000
La prórroga de la emergencia habitacional atraviesa un momento crítico en el Concejo Municipal. Tras una intensa jornada de negociaciones en comisión, el proyecto deberá volver a ser reformulado para conseguir los votos necesarios que hoy no tiene asegurados.
Durante la sesión de comisión de ayer, quedó en evidencia que la iniciativa del Ejecutivo Municipal no cuenta con el respaldo suficiente para su aprobación. Los concejales opositores, si bien no rechazan de plano la herramienta de la emergencia, cuestionan duramente los antecedentes de muchos desarrollos habitacionales que actualmente no cuentan con servicios básicos o títulos de propiedad en regla.
Ante este escenario, las partes llegaron a un acuerdo procedimental que permitirá continuar las tratativas. Según se pudo conocer de las negociaciones, el oficialismo aceptó que el proyecto regrese a comisión para ser reformulado, buscando modificaciones que "no alteren el espíritu de la emergencia" pero que den "tranquilidad a los distintos bloques".
El presidente de la comisión explicó que debió solicitar un cuarto intermedio para consultar con el Departamento Ejecutivo, el cual finalmente accedió a la reformulación. "Desde el departamento ejecutivo me han informado que ven como una posibilidad concreta y cierta para que el día de mañana en sesión se pida el pase del proyecto nuevamente a la comisión", indicó.
La posición de los concejales que se oponen a la medida se resume en una frase: "loteos sí, negocios no". Esta distinción refleja la preocupación por que la emergencia habitacional se convierta en una herramienta para habilitar emprendimientos inmobiliarios que no garanticen los servicios básicos a los futuros propietarios.
Los antecedentes pesan en esta decisión. Varios desarrollos aprobados bajo el amparo de la emergencia habitacional presentan hoy problemas serios: falta de servicios de agua, luz, gas y cloacas, además de demoras en la entrega de títulos de propiedad definitivos.
Lo que se avecina es una sesión maratónica donde deberán resolverse no sólo el tema de la emergencia habitacional, sino también otros proyectos que quedaron pendientes y cuyo tratamiento está condicionado a los acuerdos alcanzados.
Para el oficialismo, volver a tener vigente la emergencia habitacional es "fundamental y primordial", según expresaron durante las negociaciones. Sin embargo, deberán ceder en aspectos que generen mayor control y garantías en los desarrollos que se aprueben bajo esta figura.
La reformulación del proyecto deberá encontrar el equilibrio entre la urgencia habitacional que atraviesa la ciudad y las demandas de mayor transparencia y control que exigen los concejales opositores.
El acuerdo alcanzado en comisión representa apenas el primer paso de una negociación que promete ser compleja. El oficialismo deberá demostrar que está dispuesto a incorporar modificaciones sustanciales que atiendan las preocupaciones sobre el control de los desarrollos, mientras que la oposición enfrentará la responsabilidad de no trabar una herramienta que consideran necesaria para abordar el déficit habitacional.
El resultado de estas negociaciones definirá no solo el futuro inmediato de la emergencia habitacional, sino también la capacidad del Concejo Municipal para encontrar consensos en temas sensibles que impactan directamente en la calidad de vida de los ciudadanos.