Por: Bache3000

El Concejo Deliberante de Bariloche enfrenta una situación compleja para designar al nuevo Defensor del Pueblo, luego de que venciera el mandato de la actual defensora, Analía Woloszczuk. A partir de hoy, la Defensoría del Pueblo se encuentra oficialmente acéfala. La sesión de este martes evidenció las dificultades para alcanzar los dos tercios necesarios para la proclamación, en un escenario donde la mayoría de los bloques muestra predisposición al diálogo, pero uno mantiene una postura inflexible.

Durante el debate, se destacó que los dos bloques con mayor representación - Frente de Todos y Juntos Somos Río Negro - han demostrado flexibilidad en las negociaciones. "Quiero reconocer a los dos bloques mayoritarios que no se han plantado en una postura irreductible, irresoluble y que han permitido que se baraje distintos proyectos, distintos candidatos posibles", señaló el edil Facundo Villalba durante la sesión.

Esta apertura contrasta con la rigidez de un bloque que mantiene la posición de "es mi candidato o no es nadie", según expresaron fuentes del Concejo.

El panorama se complica por la cantidad de candidatos presentados y la diversidad de posturas. Juan Mandagarán habría conseguido siete adhesiones, pero enfrenta el rechazo declarado de cuatro bloques, haciendo matemáticamente imposible alcanzar los dos tercios requeridos.

"La cantidad de candidatos y la determinación que hizo cada uno de los bloques no solo merece el respeto, sino también no mezclar estas cosas", explicó el concejal Leandro Costa Brutten durante su intervención, defendiendo que las decisiones deben basarse en convicciones y no en "intercambio de favores".

Acefalía y búsqueda de soluciones

Ante la imposibilidad de designar al nuevo defensor, surgió la propuesta de solicitar por escrito a la actual defensora, Analía Woloszczuk, que continúe en el cargo hasta resolver la situación. Sin embargo, esta alternativa generó debate sobre su viabilidad legal.

"No se le puede prorrogar el mandato a la defensora actual. No está dentro de la normativa. No solo no es un cargo prorrogable, sino que sería una mala señal", advirtió otro concejal, sugiriendo como alternativa que el Consejo nombre un subrrogante, tal como ocurrió en situaciones similares anteriores.

La situación no es inédita en Bariloche. En la elección anterior de Woloszczuk, el proceso se extendió entre 60 y 90 días, desde que venció el mandato anterior en abril hasta su designación en junio. En aquella oportunidad, también se generaron extensas negociaciones entre bloques para alcanzar el consenso necesario.

El debate culminó con un llamado a la reflexión dirigido especialmente al bloque que mantiene la postura más rígida. "Hago un llamado a la humildad, hago un llamado a ese bloque para que reconsidere esa postura, porque así no vamos a llegar a ningún lado", expresó uno de los ediles.

La presidencia del Concejo confirmó que continuarán las reuniones de trabajo entre los presidentes de bloque para buscar los consensos necesarios, aunque no se establecieron plazos concretos para una nueva votación.

A partir de hoy, la Defensoría del Pueblo se encuentra oficialmente acéfala, en un momento donde la institución enfrenta una importante demanda ciudadana según reconocieron los propios concejales durante el debate.