Por: LA PALABRA

Los legisladores provinciales Patricia Mc Kidd y Santiago Ibarrolaza denunciaron públicamente al gobernador Alberto Weretilneck por utilizar el Poder Judicial con fines de persecución política, en lo que calificaron como una estrategia sistemática para “silenciar voces críticas y evitar alternativas electorales reales” en Río Negro. Lo hicieron mediante un comunicado que retoma y respalda declaraciones del exintendente de Bariloche, Gustavo Gennuso, quien acusó al mandatario de presionar a fiscales para iniciar causas judiciales contra exintendentes opositores, en el marco del programa Techo Digno.

“Las palabras de Gennuso confirman lo que venimos denunciando hace tiempo. En Río Negro, el gobernador utiliza la Justicia como herramienta política para tapar el fracaso de su gestión”, expresaron los legisladores. “Estas maniobras no son aisladas ni casuales. Forman parte de un modelo de poder que no tolera voces críticas ni adversarios”.

En sus recientes declaraciones a Radio Con Vos Bariloche, Gennuso —quien fue intendente durante ocho años representando a Juntos Somos Río Negro— expuso fuertes críticas hacia el funcionamiento interno del partido gobernante. Dijo que el espacio “quedó en manos de una sola persona con poder”, en alusión directa a Weretilneck, y lo calificó como una estructura que opera desde el temor y la obediencia personal. “El partido no existe. Funciona como algo unipersonal o de dos o tres personas que deciden todo”, expresó.

Mc Kidd e Ibarrolaza consideraron “alarmante” que un exdirigente central del oficialismo confirme un uso discrecional del poder judicial con fines políticos, y advirtieron sobre el contexto crítico que vive la provincia. “Mientras el gobierno se dedica a perseguir opositores, la provincia se hunde en una crisis profunda: escuelas en ruinas, hospitales sin insumos, salarios estatales por debajo de la línea de pobreza y una policía sin recursos”, detallaron.

A su vez, indicaron que “el gobernador se esconde detrás de causas armadas, operaciones judiciales y discursos vacíos”, y que no hay gestión concreta ni rumbo político. “Desde la oposición no nos vamos a callar. Vamos a seguir denunciando esta estrategia sistemática de silenciamiento y desprestigio. No tenemos miedo”, afirmaron.

El comunicado finaliza con un llamado a recuperar el debate político sin presiones judiciales: “La democracia se defiende con libertad, con verdad y con coraje. Basta de persecución política. Basta de usar la Justicia como garrote. Río Negro necesita futuro, no un régimen que gobierna con miedo”.

Las declaraciones de Gennuso se producen luego de meses de bajo perfil político y alimentan el debate interno dentro del oficialismo. Pese a ser secretario general del partido, el exjefe comunal afirmó estar “prácticamente afuera” de Juntos y descartó intenciones electorales. “Nunca fui obsecuente, nunca levanté la mano al campeón”, dijo en referencia al liderazgo de Weretilneck, y agregó que muchos militantes del espacio “se manejan por miedo a que les saquen cosas”.

La polémica suma un nuevo capítulo a la tensión creciente entre el oficialismo rionegrino y diversos sectores de la oposición.