

Por: Bache3000
Todo comenzó cuando los concejales esperaban al jefe comunal para someterlo a interpelación. Pero en lugar de Cortés, ingresó Domínguez con la misión imposible de reemplazarlo. La reacción fue inmediata y contundente: nadie le compró la película.
Gerardo del Río, desde el oficialismo, quería darle la palabra a Domínguez, pero se encontró completamente solo en esa posición. La oposición, encabezada por Facundo Villalba, Julieta Wallace, Leandro Costa Brutten y Roxana Ferreira, cerró filas junto a Juntos Somos Río Negro en una alianza improbable que demostró su particular mix de cintura política y malabarismo institucional.
El argumento de los concejales fue demoledor: las interpelaciones son personales e intransferibles según el artículo 38, inciso 19 de la Carta Orgánica Municipal. Si Cortés quería asistencia técnica, podía venir acompañado de un especialista, pero jamás enviar un reemplazante. Además, el intendente tenía hasta las 9:00 de la mañana para justificar su ausencia y proponer nueva fecha, cosa que no hizo.
La situación se volvió más bizarra cuando quedó en evidencia que Domínguez ni siquiera es funcionario público. Es apenas un colaborador asesor, lo que hacía su presencia aún más irregular. Los concejales no le dieron ni cinco minutos de gloria: lo invitaron a retirarse sin permitirle abrir la boca.
"Una falta de respeto", "nos están tomando el pelo", fueron algunas de las expresiones que resonaron en el recinto. La indignación fue generalizada y transversal, uniendo a opositores en un reclamo unánime.
Natalia Almonacid no bajó y Laura Totonelli, bajó tarde. Algo que demuestra lo difícil que es todo para JSRN.
Las consecuencias no tardaron en llegar. Por la ordenanza de Samanta Echeñique, Cortés enfrentará un descuento del 30% de su salario por ausencia injustificada, lo que equivale a aproximadamente un millón cien mil (bruto) pesos que no verá en su próximo recibo de haberes.
Mientras tanto, las versiones sobre dónde estaba realmente el intendente se multiplicaron como hongos después de la lluvia. Cortés le dijo a Bache3000 que andaba gestionando el techo del Centro de Convenciones. Una resolución oficial hablaba de un convenio con Jujuy por el Meet Up Argentina y del lanzamiento del FoGaRío en Cipolletti. Una tercera fuente susurraba sobre una firma de alianza partidaria para "Juntos Defendemos Río Negro", evento cerrado solo para autoridades.
Desde la óptica oficial del Ejecutivo Municipal, la respuesta es que la convocatoria fue nula desde su origen, lo que justificaría todo el operativo Domínguez. Pero los concejales no se la creyeron ni un segundo y consideran que hubo múltiples incumplimientos que se suman a una lista creciente de irregularidades en la gestión de Cortés.
La sesión también tocó temas menores, como problemas con la Junta Electoral del viernes y una resolución que suspende elecciones de juntas vecinales por el referéndum, pero todo quedó opacado por el show principal.
Ahora el Concejo espera que Cortés proponga una nueva fecha para la interpelación, aunque nadie sabe si el intendente dará la cara o si volverá a enviar a otro "Mike" a hacer el trabajo sucio. Los concejales ya hablan abiertamente de juicio político, y la situación promete más capítulos en esta novela política que tiene a Bariloche como escenario.
La jornada cerró con una certeza: cuando necesites evitar una interpelación, mejor no llames a Mike.