

Por: Bache3000
El flamante nombramiento de la psicóloga social, Mariana Minuth, como Defensora del Pueblo de San Carlos de Bariloche, ha generado un intenso debate en las redes sociales, donde los usuarios expresan opiniones divididas sobre la idoneidad de la funcionaria para ocupar el cargo.
Las críticas más fuertes apuntan a la experiencia profesional de Minuth. "En serio una piba de 23 años con experiencia en panadería va a ser nuestro defensor del pueblo?????", se preguntó indignado un usuario, quien considero que "debería ser obligatorio tener título de abogado" para desempeñar funciones de defensa de los derechos humanos. El comentario refleja una preocupación generalizada sobre los requisitos mínimos para acceder al cargo, especialmente considerando que "en varias provincias es obligatorio el título de idoneidad".
La controversia se intensificó cuando los ciudadanos cuestionaron el proceso de selección. "Por qué juzgan solo con una foto?? Esperemos a ver qué respuestas da y después hablen con conocimiento de las acciones que hace o no hace", se preguntó otro usuario, quien criticó los juicios apresurados, pero reconoció las limitaciones del sistema actual: "La juzgan solo por ser joven, por lo menos se postula para hacer algo y no estar escribiendo pelotudeces como todos nosotros a través de las redes sentaditos en casa".
Sin embargo, no todas las voces son críticas negativas. Algunos usuarios defienden un enfoque más esperanzador: "Subilo porfa.. q bronca me da que ni la conocen y ya la juzgan, yo tampoco la conozco pero prefiero esperar y tener fe en q va a intentar hacer algo en un Bariloche lleno de corrupción y no tirarla abajo antes de q empiece".
La discusión también aborda la naturaleza del cargo y sus requerimientos. Un usuario argumentó que "el defensor de pueblo no tiene que ser necesariamente abogado. Conforma un equipo y trabaja en conjunto. La resolución de conflictos se centra en la mediación", sugiriendo que las habilidades interpersonales y de gestión podrían ser más relevantes que la formación jurídica formal.
Por otro lado, hay quienes defendieron la capacidad individual por encima de los títulos académicos: "Decile a los bobitos que una persona puede instruirse por cuenta propia, como yo que leo historia general, geopolítica y políticas sociales desde los 10 años y puedo sentarme a debatir con un historiador historiográfico. Un título no acredita que tenga la capacidad para cumplir un cargo".
El debate se extiendío hacia cruestionamiento más amplios del sistema político local. "Un equipo???? Se elijie una persona. No un equipo, sino votemos el equipo entero. Como ROBAN por favor, crean cargos por crear.. ponen una chica que no sabe nada, pero le meten un equipo atrás para que safe", expresó un usuario que ve en la designación un ejemplo más de las prácticas políticas cuestionables en la ciudad.
La polémica puso de manifiesto las tensiones entre diferentes visiones sobre la representación ciudadana: mientras algunos demandan credenciales académicas específicas y experiencia profesional comprobada, otros priorizan la voluntad de servicio y la capacidad de aprendizaje. El caso de Minuth se ha convertido en un símbolo de estos debates más amplios sobre la idoneidad, la meritocracia y los mecanismos de participación ciudadana en Bariloche.
La nueva Defensora del Pueblo deberá enfrentar no solo los desafíos propios del cargo, sino también las altas expectativas de una ciudadanía que observará de cerca su desempeño, en un contexto donde la confianza en las instituciones locales parece estar en entredicho.