Por: Bache3000
Durante la jornada, dos personas — progenitores actualmente se encuentran en proceso judicial de adopción de sus hijos—, luego de participar en una audiencia, se presentaron en la delegación profiriendo gritos y arrojando piedras contra el edificio provincial y vehículos particulares. Estos actos provocaron daños materiales en la propiedad y generaron una situación de angustia y de peligro hacia los trabajadores, trabajadoras y familias que se encontraban desempeñando sus tareas.
Asimismo, la violencia ejercida impactó en el normal funcionamiento del CAINA, donde se alojan niños y niñas con medidas de protección sin cuidados parentales, vulnerando el clima de contención y seguridad que la institución procura garantizar.
A través de los funcionarios que se encontraban en la delegación, se radicó la correspondiente denuncia penal contra los agresores identificados, y se solicitó refuerzo policial para resguardar tanto al personal como a las instalaciones.
La Secretaría no tolerará ningún tipo de agresión hacia sus equipos y continuará tomando todas las medidas necesarias para protegerlos.